

Psicoterapia
La psicoterapia es un proceso de aprendizaje y crecimiento que te puede brindar apoyo y ayuda en cualquier momento vital en el que sientes desorientación, vulnerabilidad, dificultad, miedo, incapacidad, etc., sin necesidad de estar “enfermo”.
Individual
El proceso de psicoterapia individual es un viaje personal que uno realiza acompañado del terapeuta. Se utilizan muchas metáforas para definirlo, pero en este caso elegimos la definición de Ángeles Martín, por ser concreta y clara:
“En lo que se refiere al proceso terapéutico, éste nunca es un proceso terminado, como tampoco lo es el ser humano, sino que la persona junto con el terapeuta aprende a desarrollar el darse cuenta que necesita para solucionar sus problemas de intercambio con el ambiente, que le permiten vivir una vida acorde a sus capacidades y necesidades. El criterio de éxito terapéutico no es la aceptación social, ni la cantidad de relaciones interpersonales, sino el aumento de su capacidad de darse cuenta y de un funcionamiento más eficiente. El foco del proceso terapéutico gira en torno a lo que el paciente hace, cómo lo hace y para qué lo hace, solo así podrá producir cambios en su vida. Que sienta piense y actúe de una forma integrada y lo más armónicamente posible. Por último, el objetivo de la terapia es que la persona logre la mayor integración posible para su desarrollo. En palabras de Perls sería que la persona alcance la madurez y consiga pasar del apoyo ambiental al autoapoyo.”
Pareja y Familiar
La psicoterapia de pareja tiene como objetivo ayudar a la pareja en alguna dificultad concreta, crisis o momento vital en el que se necesite ayuda para reestablecer la comunicación o afrontar algún cambio.
La psicoterapia familiar tiene como objetivo ofrecer a la familia un espacio neutro para ayudarla a afrontar o atravesar alguna dificultad concreta.
Tanto en la terapia de pareja como en la familiar las sesiones se realizan en hora y media con Esther y Jenny.
Infantil
Se pueden consultar todo tipo de dificultades emocionales y de comportamiento en los niños sin importar la edad.
Dificultades de relación, de comportamiento o escolares suelen ser los motivos habituales para consultar con un psicólogo.
Si sientes que no encuentras herramientas para manejar algo que hace sufrir a tu hijo, a ti, o a alguien del grupo familiar, es un buen momento para pedir una sesión.
Por lo general, los padres acuden a una primera sesión con la terapeuta. A partir de ahí decidimos el tipo de intervención y cómo van a ser las sesiones, pudiendo venir el niño sólo (tras conocer a la terapeuta con los padres), los padres sin el niño o toda la familia.